Reparación de desperfectos existentes en diferentes dependencias del Colegio Nuestra Señora del Castañar, con especial incidencia en el pabellón deportivo situado bajo el patio de recreo.
Defectos en la ejecución de la obra, ocasionaron filtraciones de agua y humedades en diferentes estancias. La singularidad de estas reparaciones estuvo en la prueba de carga que se llevó a cabo y que se detalla con mayor detalle en nuestro blog.
El patio del colegio es una cubierta plana, y está construido con pilares y vigas descolgadas de hormigón armado, y con un forjado a base de losas alveolares de hormigón armado. Esta solución proporciona un gran espacio diáfano destinado a pabellón deportivo.
Gran parte de la problemática existente provenía por la solución adoptada en el proyecto. Al tratarse de un espacio muy amplio, con una medianera contra terreno natural, se diseñó un muro de contención ejecutado a doble cara. Esta solución hacía necesario el encofrado por el trasdós del muro (lateral de la medianera), pero hace posible la creación de una protección por el trasdós, con una lámina impermeable, un encachado y un tubo drenante que reconduce el agua evitando humedades. Sería necesario apurar el espacio, realizando la excavación “al límite” de la parcela, ya que al espesor del muro cabría sumar el espacio para colocar los paneles de encofrado, además del necesario para la maniobrabilidad de los operarios. Además, hay que añadir que tratándose de una excavación de aproximadamente 8-9 metros, hay que aumentar la anchura de trabajo por seguridad de los operarios, por si en un momento dado se produjera el desprendimiento de algún pequeño elemento rocoso. Todo este ancho puede estimarse en unos 2-2’5 m.
En el caso de esta reparación de desperfectos para ahorrar espacio, y poder conseguir el ancho necesario para que las pistas deportivas fueran útiles, se optó por realizar un muro de hormigón ejecutado a una cara, que aunque tiene un espesor superior al ejecutado a doble cara, se ahorra el espacio de trabajo, además de minimizar riesgos para los operarios. Por el contrario, aumentan las posibilidades de aparición de humedades provenientes del terreno.
Este factor hizo necesaria la ejecución durante estas obras, de ejecutar una cámara, un espacio hueco que recondujera las aguas que llegaban desde el terreno medianero y atravesaban el muro de hormigón en algunos puntos débiles, y las recondujeran hasta la red de saneamiento.
